¡Qué sola estabas por dentro!
Cuando me asomé a tus labiosun rojo tunel de sangre
oscuro y triste se hundía
hasta el final de tu alma.
Cuando penetró mi beso
su calor y su luz daban
temblores y sobresaltos
a tu carne sorprendida.
Desde entonces los caminos
que conducen a tu alma
no quieres que estén desiertos.
¡Cuántas flechas, peces, pájaros,
cuántas caricias y besos!
MANUEL ALTOLAGUIRRE
7 comentarios:
Altolaguirre está entre mis favoritos, ultimamente, yo diría que en el número uno, será que sus versos me llegan y traspasan y no me canso de releerlo.
Gracias
Besos
ala, un malagueño por aquí, pues aquí tienes otro: yo, jaja,
Me ha gustado, gracias por ponerlo,
un beso
Juanma
Qué hermosos estos versos!...con muy buena musicalidad.
Que pases un buen domingo!
Lo bueno, si breve, dos veces bueno...
Un breve pero intenso poema, como no de Altoaguirre.
Un besito
Precioso poema de un malagueño algo olvidado.
Besos desde Malaga.
¡Qué dura es la soledad! Yo lo sé bien, por lo que vengo para hacerte compañía, esperando que tú no estés sola por dentro. Un beso y gracias por visitar mi desván. Espero que te gustara. Hasta pronto.
Preciosos versos de un autor semiolvidado (por no decir olvidado por entero)
¡Quién pudiera entrar un ratito en tu biblioteca!
Abrazos.
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