Estimados amigos blogueros.
Hoy se cumplen 36 días de mi última entrada en el blog. Podría citar un montón de excusas que me justificaran pero voy a resumirlas todas en una sola palabra: desgana.
Una serie de contratiempos personales en mi vida me han hecho zambullirme de lleno en una especie de letargo del que a duras penas sales para realizar lo indispensable. Espero y deseo que poco a poco adquiera un ritmo normal, tanto en mi blog como visitando los vuestros; entre otras cosas, porque en el fondo, los echo mucho de menos...
Os dejo un poema que tuve la suerte de poner ante mis ojos hace muy pocos días.
Espero que os agrade tanto como a mí.
Hoy se cumplen 36 días de mi última entrada en el blog. Podría citar un montón de excusas que me justificaran pero voy a resumirlas todas en una sola palabra: desgana.
Una serie de contratiempos personales en mi vida me han hecho zambullirme de lleno en una especie de letargo del que a duras penas sales para realizar lo indispensable. Espero y deseo que poco a poco adquiera un ritmo normal, tanto en mi blog como visitando los vuestros; entre otras cosas, porque en el fondo, los echo mucho de menos...
Os dejo un poema que tuve la suerte de poner ante mis ojos hace muy pocos días.
Espero que os agrade tanto como a mí.
LA GENTE QUE ME GUSTA
Me gusta la gente que vibra, que no hay que empujarla,
que no hay que decirle que haga las cosas,
sino que sabe lo que hay que hacer,
y que lo hace en menos tiempo de lo esperado.
Me gusta la gente con capacidad para medir las consecuencias de sus acciones,
la gente que no deja las soluciones al azar.
Me gusta la gente estricta con su gente y consigo misma,
pero que no pierda de vista que somos humanos y que nos podemos equivocar.
Me gusta la gente que piensa que el trabajo en equipo
produce más que los caóticos esfuerzos individuales.
Me gusta la gente que sabe la importancia de la alegría.
Me gusta la gente sincera y franca
capaz de oponerse con argumentos serenos y razonables.
Me gusta la gente de criterio, la que no se avergüenza de reconocer
que no sabe algo o que se equivocó.
Me gusta la gente que al aceptar sus errores,
se esfuerza genuinamente por no volver a cometerlos.
Me gusta la gente capaz de criticarme constructivamente y de frente,
a estos les llamo mis amigos.
Me gusta la gente fiel y persistente,
que no fallece cuando de alcanzar objetivos e ideas se trata.
Me gusta la gente que trabaja por resultados.
Con gente como esa, me comprometo a lo que sea,
ya que con haber tenido a esa gente a mi lado
me doy por bien retribuido.
MARIO BENEDETTI
Me gusta la gente que piensa que el trabajo en equipo
produce más que los caóticos esfuerzos individuales.
Me gusta la gente que sabe la importancia de la alegría.
Me gusta la gente sincera y franca
capaz de oponerse con argumentos serenos y razonables.
Me gusta la gente de criterio, la que no se avergüenza de reconocer
que no sabe algo o que se equivocó.
Me gusta la gente que al aceptar sus errores,
se esfuerza genuinamente por no volver a cometerlos.
Me gusta la gente capaz de criticarme constructivamente y de frente,
a estos les llamo mis amigos.
Me gusta la gente fiel y persistente,
que no fallece cuando de alcanzar objetivos e ideas se trata.
Me gusta la gente que trabaja por resultados.
Con gente como esa, me comprometo a lo que sea,
ya que con haber tenido a esa gente a mi lado
me doy por bien retribuido.
MARIO BENEDETTI