23 de octubre de 2008

No es el amor quien muere


No es el amor quien muere,
somos nosotros mismos.

Inocencia primera
abolida en deseo,
olvido de si mismo en otro olvido,
ramas entrelazadas,
¿Por qué vivir si desaparecéis un día?

Sólo vive quien mira
siempre ante sí los ojos de su aurora.
Sólo vive quien besa
aquel cuerpo de ángel que el amor levantara.

Fantasmas de la pena,
a lo lejos, los otros,
los que ese amor perdieron,
como un recuerdo en sueños,
recorriendo las tumbas
otro vacío estrechan.

Por allá van y gimen,
muertos en pie, vidas tras la piedra,
golpeando la impotencia,
arañando la sombra
con inútil ternura.

No, no es el amor quien muere.

LUIS CERNUDA

No hay comentarios: