26 de abril de 2012

Este jueves, un relato: Manías, superticiones, amuletos y otras "rarezas" varías.

Sin duda, que con el relato de este jueves, vamos a conocernos un poco más. Del enunciado que pone a nuestra disposición Cristina tengo que confesaros que "tan solo" tengo manías. Lo malo es que son varías. Y, como dejó dicho el escritor Baltasar Gracián:  lo bueno, si breve, dos veces bueno, voy a intentar que sea lo primero, para no cansaros, y convertirlo en lo segundo...

De todas mis manías, la que más me incomoda es una que me acompaña más de una  noche. Soy incapaz de entregarme a los brazos de Morfeo con alguna de las puertas del armario de mi alcoba abierta. Hay veces, que me doy cuenta de ello cuando ya estoy en horizontal y con el libro de cabecera entre mis manos.  Y, aunque no me gusta señalar, siempre se queda abierta alguna de la parte derecha, o lo que es lo mismo, la zona destinada a las pertenencias de  mi esposo.

-Leo un rato y me levanto a cerrarla-me propongo.

La lectura en el silencio reinante de la noche me va conduciendo a ese sopor que te abre  las puertas del maravilloso mundo del sueño. Voy perdiendo la visibilidad de la letra impresa, el libro se acurruca en su abandono, mis antiparras intentan deslizarse de las orejas donde montan guardia, y, de repente, me asalta el recuerdo de que no he cerrado la maldita puerta y dejo a Morfeo empantanado. 

Por unos instantes, me debato entre esforzarme en dormir con la puerta tal cual y "superar" esa engorrosa manía o, levantarme y darle un mamporro . Incapaz de lo primero, opto por lo segundo.  Y me enrabio conmigo misma por tozuda. Y aún me enrabio más, cuando veo al "olvidadizo" de mi esposo durmiendo plácidamente -en ese preciso momento de mi lucha mental- como un bebé.

Seguiré intentándolo. O mejor. A ver si hay suerte y, el susodicho, me lee este jueves y se enmienda. Sabré recompensarlo...


Maat

Más "rarezas varias" en: http://conunasonrisaa.blogspot.com.es/




 

23 de abril de 2012

Hasta luego


HASTA LUEGO
Ha llegado la hora de retirarse
Estoy agradecido de todos
Tanto de los amigos complacientes
Como de los enemigos frenéticos
¡Inolvidables personajes sagrados!

Miserable de mi
Si no hubiera logrado granjearme
La antipatía casi general
¡Salve perros felices
Que salieron a ladrarme al camino!
Me despido de ustedes
Con la mayor alegría del mundo.

Gracias, de nuevo, gracias
Reconozco que se me caen las lágrimas
Volveremos a vernos
En el mar, en la tierra donde sea.
Pórtense bien, escriban
Sigan haciendo pan
Continúen tejiendo telarañas
Les deseo toda clase de parabienes:
Entre los cucuruchos
De esos árboles que llamamos cipreses
Los espero con dientes y muelas.

NICANOR PARRA

(Premio Cervantes de Poesía 2011)

Hoy, 23 de Abril y coincidiendo con la conmemoración de la muerte de Miguel de Cervantes y de Willian Shakespere, se celebra el día del Libro. El Principe Felipe ha hecho entrega al nieto de Nicanor Parra, el premio Cervantes de Poesía, otorgado al poeta chileno y ante la imposibilidad de viajar él mismo a recogerlo por su avanzada edad.

 Maat

(Imagen de Internet. Autor: Vek-By)

19 de abril de 2012

Este jueves, un relato: Una de espías.



Tan solo se hubiera conformado con un poco de cariño. Eso hubiese hecho posible otras cosas...Pero su existencia era, desde hacia algún tiempo, una verdadera pesadilla. Llevaba siete años trabajando en esa inmunda cantina al lado de su mal oliente esposo. Sus días transcurrían aguantando ordenes y frases humillantes que le dedicaba el que un día, le prometió amor eterno. Muchos atardeceres, anhelaba desaparecer junto al sol, y perder de vista aquellos rostros de cementerio que iban sucumbiendo con el alcohol que a lo largo del día iban ingiriendo.

Las copas eran malas compañías que desataban las lenguas. Sofia no perdía detalle. Se movía con soltura entre los parroquianos, a pesar del humo del tabaco que envolvía el antro y que le ahogaba. Servía las comandas en su resplandeciente bandeja plateada, que era el único elemento del local que mantenía impoluto.

Un oficial se había fijado en ella y, entre ambos, montaron un buen negocio. Tan solo tenía que escuchar conversaciones y, atendiendo fielmente ciertos parámetros, confeccionar listas. Ese quehacer no iba a durar mucho tiempo. Sólo el justo para "limpiar" los individuos que pudieran causar problemas al nuevo régimen. A cambio, mucho dinero y papeles para abandonar el país con una nueva identidad.

Esa noche, -como otras muchas-al abandonar la cantina, Sofia entregó un bocadillo al harapiento anciano que, en la puerta, hacia sonar con cierta ternura su desgastado violín. Era su contacto. Un guiño le hizo saber que en la envoltura de su cena, iba una nueva lista. La última.

La mujer emprendió el camino de vuelta a casa con una excitación mal disimulada. Por fin, su vida terminaba de ser inútil. Se acababan los insultos, las vejaciones, las palabras soeces, el limpiar vomiteras, los pellizcos furtivos en sus nalgas... A partir de ya, le esperaba una nueva vida, muy lejos de aquel odiado lugar.

En la soledad de la alcoba y, acompañada por el silencio reinante en su destartalada casa, levantó uno de los ladrillos de debajo de su cama -escenario mudo de repulsivos momentos sufridos- donde atesoraba su gran secreto: un buen fajo de billetes fruto de sus listas, a los que acarició emocionada y devolvió sigilosamente al escondite. Mañana serían algunos más y...punto final.

Cuando la echaran de menos, ya estaría volando hacia nuevos y esperanzadores horizontes. Una malvada sonrisa se adueñó de la comisura de sus labios al recordar que, su última lista, iba encabezada por un nombre y apellidos sorpresivos: los de su esposo.



Más espionajes: http://jwancarlos.blogspot.com.es/


Maat




14 de abril de 2012

Cazando elefantes

Diversos medios de comunicación nos han dado a conocer hoy la noticia de que el rey Juan Carlos andaba por Botsuana cazando elefantes cuando ha sufrido una caída con resultado de fractura en tres fragmentos de su cadera derecha y que ya le han sido reconstruidos- la pasada madrugada- por el Dr. Villamor en el hospital USP San José de Madrid. Al mismo tiempo, le han colocad0 una prótesis en esa misma cadera.

Con la que está cayendo por estos lares, me cuesta entender que el monarca ande de caza mayor fuera de nuestras fronteras. Y, si encima es cierto que la captura de cada elefante ronda los 30.000 euros ya ni os cuento...

Las piezas realmente interesantes de darles caza son nacionales, majestá, paquidermos de dos patas que han dejado
este país, cada vez menos nuestro, como elefante en una cacharrería. Y lo que nos queda...

Y digo yo desde mi ignorancia suprema: ¿que mal hacen los elefantes para que la realeza ande tras ellos para darles caza?

Con lo bien que se está en casa, Juanca. Sobre todo en la tuya.

¡Hale! a mejorarse.


Maat






12 de abril de 2012

Este jueves, un relato: Colombia

Colombia puede presumir de gran solera poética. Se considera que es el país donde más gusta escuchar poemas. Quizá sea por este motivo por el que se celebra en esas tierras dos de los acontecimientos más importantes de poesía en lengua hispana: el Festival Internacional de poesía de Medellín y el Festival Hispanoamericano de poesía de Bogotá. Gracias a estos eventos, centenares de autores se encuentran plácidamente con sus fervientes lectores.

Me gusta la poesía. Durante un tiempo ha sido mi cobijo y mi sosiego. Incluso me he atrevido a juntar algunos versos creyendo componer sentidos poemas...

Esta semana, gracias al tema que nos ha propuesto Wendy, he descubierto ciertos poetas colombianos dignos de ser leídos: Jorge Isaacs, Rafael Pombo, Porfirio Barba, Tomás Carrasquilla, Gonzalo Arango, Alvaro Mutis, entre otros muchos. Y me apetece que mi participación en este jueves sea dejando en este espacio algunos de sus poemas. Para muestra, basta un botón.


REVOLUCIÓN

Una mano
más una mano
no son dos manos.
Son manos unidas.
Une tu mano
a nuestras manos
para que el mundo
no esté en pocas manos
sino en todas las manos.

GONZALO ARANGO


LIED DE LA NOCHE

Y, de repente,
llega la noche
como un aceite
de silencio y pena.
A su corriente me rindo
armado apenas
con la precaria red
de truncados recuerdos y nostalgias
que siguen insistiendo
en recobrar el perdido
territorio de su reino.
Como ebrios anzuelos
giran en la noche
nombres, quintas,
ciertas esquinas y plazas,
alcobas de la infancia,
rostros del colegio,
potreros, ríos
y muchachas
giran en vano
en el fresco silencio de la noche
y nadie acude a su reclamo.
Quebrantado y vencido
me rescatan los primeros
ruidos del alba,
cotidianos e insípidos
como la rutina de los días
que no serán ya
la febril primavera
que un día nos prometimos.

ALVARO MUTIS



Mas temas sobre Colombia en: http://eurovisionojosdemujer.blogspot.com.es/


Maat

9 de abril de 2012

Tu amor


Me da miedo despertar mañana

aún queriéndote, porque

tratándose de ti, aprendí

que el amor va y viene

pero nunca se queda...

Maat



Imagen de Alniksys

5 de abril de 2012

Este jueves, un relato: Obras en casa

Cierto día, cansada de los problemas que me ocasionaba el uso de la bombona de gas para los temas culinarios de mi hogar, opté por que me instalaran el "comodísimo" gas ciudad. No me faltaron las ofertas y reclamos de alguna que otra compañía para que me hiciera consumidora de su azulada fuente de energía. Y, además, de un tiro iba a matar dos pájaros, pues con ese cambio, se iban a terminar las incómodas duchas a medias pues, vaya usted a saber por qué, siempre se vaciaba la bombona cuando más a gusto estabas -super enjabonada-bajo el reconfortante chorro de agua templada.

Los instaladores invadieron mi cocina una mañana a eso de las 8. Llegaron tres, dos de ellos eran los portadores de todas las herramientas, cajas, tubos de cobre ...que iban a ser claveteados por mis sufridos azulejos. Después de dar las instrucciones pertinentes, el encargado tomó las de Villadiego y ya no lo volví a ver. En un pis pas, el suelo de mi pequeño reino se convirtió en intransitable. Tímidamente dejé un cepillo apoyado en una pared, pero seguramente no sabían cual era su cometido y se quedó tal cual.

El primer día lo llevé bastante bien. Me había preparado concienzudamente inspirada por una frase de mi esposo que resonaba en mi mente con fuerza según iban pasando las horas de "reforma":

-¿Te lo has pensado bien eso de meterte en cambios?

En la mañana del segundo día empezó mi particular calvario. La instalación estaba completada, algunos de mis cacharros embalados ya convivían armoniosamente con escombros, cajas de cartón vacías, pedazos de tubos, herramientas varias, etecé, etecé, etecé... Pero algo fallaba, un diminuto dispositivo negro les certificaba machaconamente la presencia de un ligero escape. Repasaron concienzudamente toda la tubería instalada, y nada. La fuga seguía dando muestras de su pertinaz presencia. Al caer la tarde, los dos "oficiales", luchaban a brazo partido con el escape, pero no se hacían con él y yo, empezaba a perder mi aplomo. Me tomé la libertad de indicarles si no podía ser que la llave de paso tuviera algún defecto que facilitara esa pérdida de gas, pero chapurreando un defectuoso castellano uno de los empleados me espetó que la pieza estaba homologada y que "eso" no era posible...Pues bien, oiga.

Terminada su segunda jornada, se marcharon cabreados y vestidos de impotencia. Desolada, en medio de mi destartalada cocina me preguntaba una y otra vez aquello de: ¿para qué me habré metido en este lio?

La mañana del tercer día fue más de lo mismo. La fuga, el escape, la pérdida azulada seguía pululando libremente por los bajos de mi cocina y haciendo "pitar" a ese pequeño artilugio que detectaba su presencia. En más de una ocasión, las manos que lo sostenían, llegaron a temblar presas de los nervios motivados por la vehemente incapacidad para localizarla.

Al mediodía, cuando los instaladores regresaron de su hora de comer, les abrí la puerta de mi casa con cara de pocos amigos- solo me faltaba el rodillo de amasar en las manos- a la vez que, sin ningún titubeo les ordené que desmontaran todo lo que habían instalado y que en una hora, los quería fuera de mi cocina. Que ya no quería el dichoso gas.

La mirada que me lanzó el "otro" empleado con sus ojos de color cielo tardaré en olvidarla. La desolación se dibujó repentinamente en aquel rostro de piel lechosa sobre la que caían caprichosos rizos dorados. Fue en ese momento, cuando me fijé en sus manos. Más parecían de un concertista de piano que de un instalador de gas. Estos rasgos físicos, unidos a su total ausencia de conversación por desconocimiento del idioma , me hizo pensar que quizá era una de las personas que habían acudido a nuestro país en busca de una vida mejor y, lógicamente, mi actitud le desconcertó.

En menos de 20 minutos, el que había tomado las de Villadiego volvió acompañado por otro "jefe" a la llamada de socorro que recibieron desde mi casa. Informados in situ del problema, actuaron con rapidez. ¿Qué hicieron? Lo primero, comprobar LA LLAVE DE PASO HOMOLOGADA, que, ante la sorpresa de todos los presentes, se comprobó que estaba defectuosa. Jamás he recibido tantas disculpas.

En apenas dos días, mi cocina volvió a la normalidad y mis ollas, pucheros y sartenes, se dejaban calentar el culete con la nueva fuente de energía no renovable, a la que casi, le prohibí la entrada en mi casa.

En unos días...todo quedó en una anécdota doméstica sin más.


Más reformas en casa del diablillo de Gus que no nos deja descansar ni en Semana Santa.

http://callejamoran.blogspot.com.es/



Maat










3 de abril de 2012

Dibujando sonrisas: Antonio Mingote


Antonio Mingote, ha fallecido hoy en Madrid a la edad de 93 años. Humorista gráfico, ilustrador, escritor, académico y observador de la vida que, con especial filosofía, plasmaba en sus dibujos.


Sus mordaces palabras en forma de viñetas, evidenciaban cada día una pizca de las realidades de nuestro entorno. En su recuerdo y con el agradecimiento por las sonrisas que ha esbozado en los rostros de los que seguían a sus personajes, traigo hasta mi blog una pequeña muestra de su buen hacer.


D.E.P.















Maat